viernes, agosto 26, 2011

LOS JOVENES DE ESPIRITU.




Se les nota. No importan ni las canas ni las arrugas para reconocerlos. Sus miradas conservan todavía ese aire soñador de la juventud y hasta una pizquita de ingenuidad. Aún se emocionan con una canción de amor y les puede latir fuerte el corazón cuando sienten la presencia de alguien especial. Son rocas admirables, vencedores de la vida que conservan las alegres ilusiones. Todavía les sigue gustando la poesía y se muestran cómplices y compañeros de los jóvenes. No envidian la juventud porque no se sienten viejos, aunque se cuidan para estar lo mejor posible dentro de su edad. Son bondadosos.

jueves, agosto 25, 2011

La Ausencia.

Eso siento, precisamente la ausencia de todo, se fueron tus padres, me queda mi hermana, mi sobrina... mi hijo que se fue a estudiar a otra ciudad y... queda la ausencia, el vacío, el tener que aprender... que es así, que los hijos se van y te quedas sola.... 11años separada... no querer compromisos por tener a tu hijo como el marido chico de la casa....... y hoy sola. Me siento sola de verdad........es super triste... si a alquien puedo decirle algo, es no te quedes sola. Bendiciones para Uds.

martes, agosto 09, 2011

Despedida a Mamá.

PALABRAS DE DESPEDIDA EL 17 DE JULIO 2011.




Hoy nos hemos reunido para despedir los restos de nuestra Madre. Me cuesta hablar, pero necesito hacerlo: hablar de la Resurrección y de la Nueva Vida, de Esperanza para ti Madre Amada.
Para todos nosotros has muerto y nos has dejado... Para Dios y ante nuestra fe has resucitado y has nacido a la Nueva Vida, junto a EL.
Es como esa rama cargada de frutos que cae a la tierra debido al peso de los frutos que ha producido, por lo que dicho de otra forma esos frutos son semilla de nuevos árboles y alimento para otros.
Madre Amada, sabemos que luchaste en la vida.... Has hecho el bien y esto no te arrebata de la muerte sino que te transforma, es tu mayor Corona.
Madre amada estamos seguros que el Padre ya te ha recibido, te ha abrazado y estás ahora gozando de su amistad y de esa felicidad para siempre.
Nuestra fe en el Padre nos garantiza y asegura que a todos nosotros nos espera la misma suerte que no es otra que, morir para resucitar.
Gracias a todos los presentes por acompañarnos a dejar en su última morada a nuestra Amada Madre, gracias. Tú Hija Julia.